La habitación en la que me alojé en el Melia Dusseldorf fue simplemente increíble. Tenía una cama grande y cómoda, una cafetera Nespresso para disfrutar de un delicioso café por la mañana, y también me encantó la vista espectacular al parque desde mi habitación. Me sentí como en casa con todos estos detalles.

Si tuviera que mencionar algo que no me gustó tanto, sería el baño. Aunque estaba limpio y tenía todo lo necesario, la ducha era un poco pequeña para mi gusto.

Nos ha gustado este hotel. Todos eran acogedores. Toda la comida estaba fresca.

Experiencia culinaria creativa y elegante, con una iluminación única en la terraza que transforma el ambiente en un sueño. La interpretación innovadora de la deliciosa cocina mediterránea hace de este lugar un destino memorable.

Falta de opciones de menú en el restaurante los domingos por la noche.

Toda la comida estaba riquísima.

La habitación era reformada y ordenada, la comida estaba deliciosa, todo de 4 estrellas. Servicio estupendo. El WiFi gratis disponible en el hotel.

La comida estaba buena.

Una habitación práctica, con un buen diseño y extremadamente agradable con camas bastante buenas, y un minibar, una caja fuerte y una mesa de trabajo. Un edificio guay, el cuarto es espacioso. Una ubicación ideal y bonita, a 5 minutos a pie del Hofgarten. Situado en una zona natural, muy, pero que muy cerca del centro, de los tranvías, de la principal franja comercial.

El hotel era nada especial, con una ubicación muy buena, la mejor y un wi-fi consistente. Una habitación bellamente decorada y nueva, una cama cómoda. El personal, todos además, eran muy profesionales. La vista era fabulosa y el servicio eficiente. Asimismo, disponía de un parking privado.

El personal era ocupado.

Habitaciones reformadas y muy limpias, con una cama doble, WiFi gratis. Todos los que trabajan allí eran acogedores y excepcionales. Ofrecen servicios estupendos. El estacionamiento está cerca.

Ubicación excelente, habitaciones cómodas, atención del personal muy buena. Vistas panorámicas hermosas. Buena atención en recepción. Desayuno buffet y ubicación tranquila cerca de un parque y del casco antiguo. Recomendaría y volvería a visitar.

El hotel era moderno y estaba impecable, tenía unas vistas fabulosas sobre el parque. El desayuno era maravilloso y el personal extremadamente servicial. La habitación era bien equipada y de buen tamaño, tenía una ducha adaptada, una ducha y secadores de pelo.

Las camas eran incómodas.

Me han encantado el minibar y la máquina Nespresso en la habitación. El personal y el servicio son excelentes.

Siempre vuelvo a este hotel porque el personal me ayuda con las maletas, tiene Wi-Fi, recepción 24 horas, bar/restaurante, sala de equipajes. Además, están permitidas las mascotas y no se puede fumar. Vuelvo pronto por viaje de negocios.

Quería explorar Düsseldorf y este hotel era un buen sitio para hacerlo. Todos eran agradables y excepcionales. Toda la comida estaba deliciosa. Me ha gustado todo.

Ambiente elegante y cocina creativa - Una experiencia memorable con una interpretación innovadora de la deliciosa cocina mediterránea. Una combinación de sabores única que te transporta a otro nivel.

Carta reducida en el restaurante - La selección de platos es limitada, lo cual puede resultar inaceptable para un hotel de 4 estrellas.